Cuando tenemos una empresa propia, representamos a otra empresa, o queremos lanzar nuestro propio negocio, es inevitable que nos llegue el momento de preguntarnos ¿Qué hosting comprar?.
Cuando empecemos a investigar sobre cómo funciona la cuestión, para muchos desconocida hasta este momento, veremos que muchos diseñadores de páginas web incluyen el servicio de hospedaje en el mismo precio que ofrecen por el diseño de dicha página. No hay nada reprochable en esta acción, de hecho, es lógico que nos ofrezcan un servicio completo, teniendo en cuenta que nosotros demandamos el mejor servicio para nuestra web, para que tenga buenos resultados, pero no dominamos el funcionamiento técnico para llegar a concretarlo.
Sin embargo, y en contraposición con lo anterior, lo más conveniente con bastante diferencia, y por varias causas, será que seamos nuestros propios administradores de dominio de nuestra web.
Fundamentalmente porque tendremos un total dominio sobre nuestra página, y dependeremos en mucha menor medida del diseñador. Depender del diseñador significa que tendremos que llamarlo cada vez que necesitemos introducir algún cambio, y si tenemos urgencia, el técnico puede estar disponible como no estarlo. También significa que no podremos cambiar el diseñador web, ya que él posee nuestra web en su hosting. En algunos casos -y no es con la intención de asustar a nadie- algunos usuarios han tenido que rediseñar desde cero su web con otro diseñador por este motivo.
Otra de las ventajas es que con nuestro propio hosting tendremos acceso al panel de control propio. Muchos diseñadores web, sobre todo los que contratan un hosting para todos sus clientes, no nos darán acceso al panel de control, puesto que prefieren evitar que tengamos acceso a todas las web a las que le prestan servicio.
Si conseguimos disponer de nuestro propio panel de control, tendremos el privilegio de apreciar cómo se va desarrollando nuestra web con respecto a:
-Los datos sobre la página más visitada, cuál le sigue en tránsito, y así sucesivamente.
-La posibilidad de ver un gráfico de visitas según el origen de las mismas (ciudades y países de donde provienen)
-Números de visitas por mes, días, horas, visitas nuevas y recurrentes. Este punto es de suma importancia, ya que será un termómetro incuestionable de la evolución de nuestro negocio, de la aceptación de nuestra página por parte de posibles clientes.
-Idealización, frecuencia, duración, y número de páginas por visita
-Palabras clave a través de las que los visitantes llegan a nuestra página web
-Tiempo de permanencia de los interesados en nuestra web. Nos puede dar importantes claves de aceptación o rechazo del contenido si lo sabemos interpretar.
-Datos completos sobre las fuentes de tráfico: tráfico directo, motores de búsqueda, y sitios web de referencia, entre otros datos.
Además, no está de más añadir que los mejores servicios de alojamientos web, cuentan con una garantía de por lo menos 30 días para que el cliente compruebe con total garantía la solvencia del hosting, o de lo contrario, le devolverán su dinero.